¿Este eres tú?
Antes de disfrutar la vida siempre hay:
un pendiente que resolver.
un correo que enviar.
una llamada que hacer.
un documento que corregir.
una cita que agendar.
un proyecto que terminar.
una presentación que editar.
La lista puede ser infinita.
Lo sabes muy bien.
El mito de tener que ser siempre productivo te ha consumido.
Los “Tienes que hacer más” “Tienes que ser mejor que antes” te tienen atrapado.
Te es muy complejo soltar aquello que consideras importante para disfrutar así de la vida.
Sin darte cuenta, estás perdiendo la perspectiva.
Recuerda, tu energía y tiempo no regresan.
Estas tomándote la vida muy enserio.
Haz esto para comenzar a cambiar tus días.
Fotografía por Omer Havivi via Pexels
¿Qué te impide dejar de tomarte la vida muy en serio?
La sociedad siempre espera algo de nosotros.
Que hagamos todo perfecto.
Que nos desempeñemos siempre de la mejor manera.
Aunque muchas veces eso pueda ser un impulso para nuestro crecimiento personal, también puede ser una manera de auto engañarnos y pensar que nuestro valor como persona depende únicamente de si nos va bien o no.
Sin embargo, la vida no se trata de eso.
La vida es mucho más que eso.
Nuestra existencia es limitada, atesora cada segundo que tengas.
Empieza dejando de lado esto:
preocupación constante acerca de todo lo que te rodea.
rechazo a tener tiempo de calidad para despejar tu mente.
rechazo a compartir carcajadas junto a otras personas.
ser estricto contigo y los demás.
miedo a intentar algo nuevo.
necesidad de explicarte todo el tiempo.
pensar que tienes que competir con todos.
Oigan quería recordarles que si sientes que una emoción o situación es desbordante y no sabes cómo manejarla. Podrías considerar contactar a un especialista de la salud mental. Ellos sabrán cómo guiarte de la mejor manera. No hay nada de qué avergonzarse. Lo que sientes es importante. Lo que sientes es valioso.
Tomarse muy en serio la vida es cómo construir barreras para que dejen de pasarte cosas buenas.
Es como ponerse gafas para no ver todo lo hermoso que te rodea.
Es como negarse completamente a disfrutar cada instante de la vida.
Esto es lo que podrás descubrir cuando empieces a conectar más con la única oportunidad que tienes de vivir.
¿Cómo se siente no tomar la vida tan en serio?
Lo simple, en realidad no es tan simple como parece.
Una vida con menos:
estrés
ansiedad
Es algo que muchos desean.
Sin embargo, no muchos están dispuestos a crear porque no tomarse la vida tan enserio es un gran paso, pero el más beneficio que puedes tomar.
Con esto no digo que tus problemas desaparecerán inmediatamente y será todo siempre maravilloso.
Eso no es verdad.
Lo que quiero decir es que siempre hay un momento para conectar con lo que te rodea.
Lo importante es reconocerla y aprovecharla.
Porque tomar cada oportunidad que tienes para estar más presente y dejar de lado por un momento los pendientes laborales es darte la oportunidad de disfrutar.
Es darle la oportunidad a la vida para que te sorprenda.
Desde lo más absurdo y ordinario como reírse de una anécdota que pasó años atrás con un colega mientras esperaban su turno para subir al ascensor.
Básicamente es hacer todo lo que no hacías cuando intentabas leer el email que mando tu jefe horas otras camino al trabajo.
Es una oportunidad que tomaste.
Y un gran paso que diste.
El tiempo no regresa. ¿Por qué nos preocupamos de estar más ocupados siempre?
La vida es una única oportunidad.
¿Por qué no es bueno para ti tomar la vida tan en serio?
Desde el burnout o agotamiento extremo de una vida agitada.
Sin momentos para conectar contigo y los que te rodean.
Son razones suficientes para generar un cambio en tu vida.
Todo ello y lo siguiente es lo que podrías comenzar a considerar:
El estrés y la preocupación te están engañando
¿Estresado por el trabajo?
¿Preocupado por el futuro?
Estás tomando muy enserio la vida.
Estas queriendo controlar la vida sin querer otra vez.
Lo cierto es que preocuparte o angustiarse por lo que pueda suceder no hará que las cosas cambien porque nunca tendremos el control de nada y aceptarlo es clave.
Aceptar es también recordar que la existencia humana es imperfecta.
Mientras más angustiado estés más estrés y sufrimiento traerás a tu vida.
Redirecciona tu atención.
Ante cualquier situación pregúntate:
¿Puedo hacer algo para cambiarlo?
Si la respuesta es NO entonces acepta la situación tal cual como es.
Si la respuesta es SÍ, entonces crea un plan de acción.
Siempre podemos elegir.
Abre los ojos
Porque aunque muchos piensen que mirar es lo mismo que observar.
En realidad no lo es.
Abrir los ojos para observar detenidamente la vida también requiere de voluntad.
Voluntad para detenerse a apreciar todo lo bueno.
Enfocarse en lo bueno.
Cuando eso sucede, lo negativo no es bienvenido aquí.
Siempre es el mejor momento para abrirle la puerta a lo que te llena el corazón genuinamente.
Esto se trata de elegir en qué poner tu atención y reconocer que hacerlo tiene un impacto en tu vida.
Reconocer su impacto es solo el inicio.
No te tomes la vida tan en serio, dale espacio a aquello que te hace sentir vivo.
Dale espacio por ti y para los que desean conectar contigo otra vez.
Hay personas que te extrañan
¿Recuerdas cómo se ve alguien cuando está muy concentrado en algo?
Su rostro está enfocado solo en lo que realiza y no permite que nadie lo distraiga todo el tiempo.
Te percibes exteriormente:
hostil
inaccesible
Así te ves cuando te tomas la vida muy en serio.
Cuando te sumerges en ese “proyecto” que piensas que es siempre más importante que tus amigos o familia.
Entonces, evalúa tus actividades y el tiempo que le dedicas a cada una en el día a día.
Vuelve a conectar con aquellos que aprecias de verdad.
Recupera y dirige tu energía en aquello que te hace bien.
No todo es tan importante como parece
No todo puede ser tu prioridad. Debes de elegir.
Tu tiempo es valioso, ¿Estás dispuesto a darle tu tiempo a todo?
Si es así, te diría que no te juzgo, pero puede ser agotador a largo plazo porque aunque quieras darle tu tiempo a todo, en realidad sólo estás perdiendo el foco.
El foco de lo que le brinda confort a tu vida y es realmente importante para ti.
Recuerda que dejamos esta tierra con todo lo que vivimos, con las experiencias que compartimos y el tiempo de calidad que tuvimos con otros.
No nos vamos recordando que entregamos un correo a tiempo.
Piénsalo.
¿Todo es realmente importante para olvidarte de vivir?
No eres una víctima de las circunstancias.
Solo necesitas retomar el control.
El control de tu tiempo y energía.
Es importante que recuerdes que no eres tu trabajo, eres mucho más que eso.
El trabajo es parte de tu vida, pero no lo es todo.
Tu único propósito en la vida no debe aspirar a ser solo mejor en el trabajo.
Porque si así lo haces puedes continuar pensando que la vida solo te sucede y no puedes hacer nada respecto a ella.
La vida no es lo que te pasa, es lo que tú eliges vivir.
Porque sí, siempre puedes elegir.
Al hacerlo tu vida se convertirá en ese lugar en el que puedas construir siempre mayores momentos de felicidad y confort.
Vuelve a conectar con el ahora. Evalúa la perspectiva que le das a tu vida.
Abre tu corazón y expande tu mente.
Permítete ver y agradecer la belleza de estar vivo.
Quiero preguntarte lo siguiente:
¿Te estás tomando la vida muy en serio?
Nos vemos la próxima,
Landyan.
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